por un mejor futuro
Proyecto Alimentos
Fortificados
ALIMENTOS FORTIFICADOS
¿En qué consiste el Proyecto de Alimentos Fortificados?
El Proyecto de Alimentos Fortificados tiene una serie de estrategias que complementan el proyecto de Anemia Cero.
Guía para padres sobre alimentos accesibles y nutritivos
Educación Nutricional en Hierro y Vitamina C
Desarrollamos iniciativas de educación nutricional para padres y cuidadores, basados en alimentos con fuente de hierro de origen animal y proteínas de alto valor biológico. Esto se conseguirá a través de organizar sesiones educativas, presenciales y virtuales, para padres y cuidadores sobre la importancia de una dieta rica en hierro y vitamina C, enfocándose en alimentos accesibles y económicos en comunidades.
Adicionalmente, contaremos con campañas comunicacionales a través de las cuentas de redes sociales de Peruanos por Peruanos, nuestra web, folletos impresos e infografías de fácil comprensión, en donde se muestren ejemplos de alimentos ricos en hierro (como carnes rojas, “sangrecita”, pescado, hígado, legumbres, y espinacas) y alimentos ricos en vitamina C (como cítricos, papaya, mango y piña).
Mejorando la nutrición en niños y gestantes
Consumo de Alimentos Fortificados
Promovemos el consumo de alimentos fortificados y complementarios, especialmente en niños y mujeres gestantes. Venimos impulsando el desarrollo de productos fortificados con hierro, como la papilla fortificada diseñada por el Minsa, al igual que alimentos complementarios, como micronutrientes en polvo, que pueden ser añadidos a los alimentos de los niños para mejorar su ingesta de hierro y otros nutrientes.
Es importante no solo desarrollar estos productos sino promover su consumo y hacerlos disponibles y accesibles a la comunidad. En las ferias de descarte del Proyecto Anemia Cero difundiremos estos alimentos y sus beneficios.

Alimentos Fortificados
CONTEXTO DE LA SITUACIÓN ALIMENTARIA EN EL PERÚ
Necesitamos desarrollar educación sobre la alimentación y promover alimentos fortificados para combatir la anemia y la desnutrición infantil, tanto para niños como para madres embarazadas. La falta de recursos y de conocimiento dificulta a las familias combatir la anemia.
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Alimentos Fortificados
COMBATIENDO LA ANEMIA CON ALIMENTOS FORITIFICADOS
De acuerdo con el PRAMI, son tres conceptos alimenticios que deben ser impulsados: i) alimentos fuente de hierro de origen animal y proteínas de alto valor biológico, ii) complementos alimentarios nutricionales y iii) alimentos fortificados.
Alimentos fuente de hierro de origen animal y proteínas de alto valor biológico
Los alimentos que son fuentes de hierro de origen animal y proteínas de alto valor biológico incluyen:

Carnes rojas (como la res, el cordero y el cerdo): Estas carnes son ricas en hierro hemo, que se absorbe mejor en el organismo, y contienen proteínas de alta calidad.

Aves (como el pollo y el pavo): Aunque su contenido de hierro es menor en comparación con las carnes rojas, sigue siendo una buena fuente de hierro y proteínas completas.

Pescados y mariscos: Los pescados como el jurel y el atún aportan hierro y proteínas de alto valor biológico. También los mariscos tienen un alto contenido de hierro.

Vísceras (como el hígado y el riñón): El hígado, especialmente, es muy rico en hierro y proteínas completas, siendo uno de los alimentos más recomendados en dietas para prevenir la anemia.

Huevos: Aunque contienen menos hierro que la carne y los mariscos, los huevos son una fuente de proteínas de alta calidad, y su yema aporta algo de hierro.
Estos alimentos no solo proporcionan hierro, sino que también contienen aminoácidos esenciales, lo que significa que sus proteínas son de alto valor biológico, es decir, fáciles de absorber y utilizar por el organismo.
Complemento alimentario nutricional
El alimento complementario nutricional es un producto diseñado para complementar la dieta y cubrir necesidades nutricionales específicas que no se alcanzan solo con los alimentos regulares. Estos productos suelen contener concentraciones específicas de nutrientes esenciales, como vitaminas, minerales, proteínas, ácidos grasos, y otros compuestos beneficiosos que ayudan a mejorar o mantener el estado nutricional de una persona.
Ejemplos de alimentos complementarios nutricionales incluyen fórmulas de nutrición entera, barras de proteínas, suplementos en polvo (como proteínas y aminoácidos), y bebidas enriquecidas con nutrientes.
Alimentos fortificados
Los alimentos fortificados son productos a los que se les han añadido nutrientes esenciales (vitaminas y minerales) que no se encontraban en ellos originalmente o que estaban presentes en cantidades insuficientes. La fortificación se realiza para mejorar el valor nutricional de los alimentos y ayudar a prevenir deficiencias nutricionales en la población. Este proceso es una estrategia importante de salud pública para combatir carencias nutricionales comunes en ciertos grupos de la población.
Los Alimentos Fortificados traen tres grandes beneficios:
Prevención de deficiencias nutricionales: Ayudan a reducir la prevalencia de deficiencias en vitaminas y minerales, como hierro, yodo, vitamina A, ácido fólico, entre otros.
Mejora de la salud pública: La fortificación ayuda a mejorar el estado de salud general, especialmente en grupos vulnerables como niños, embarazadas y ancianos.
Facilidad de acceso: Los nutrientes añadidos en alimentos de consumo diario permiten que estos productos fortificados lleguen a gran parte de la población.
Algunos ejemplos
de Alimentos Fortificados comunes

Harinas y cereales: Las harinas de trigo y de maíz, así como los cereales de desayuno, suelen ser fortificados con hierro, ácido fólico, tiamina y otros nutrientes. Esto ayuda a prevenir deficiencias de hierro y vitaminas del grupo B.

Arroz fortificado: En algunos programas de salud pública, el arroz se fortifica con hierro, ácido fólico y otros micronutrientes para combatir la anemia y otros problemas de desnutrición.

Leche y productos lácteos: La leche suele ser fortificada con vitamina D y, en algunos casos, con calcio adicional, para ayudar en la salud ósea.

Jugos y bebidas: Algunos jugos, especialmente los de frutas, son fortificados con vitamina C y calcio.

Aceites y margarinas: En muchos lugares, los aceites y margarinas están fortificados con vitaminas A y D, nutrientes importantes para la salud inmunológica.
Estos alimentos no solo proporcionan hierro, sino que también contienen aminoácidos esenciales, lo que significa que sus proteínas son de alto valor biológico, es decir, fáciles de absorber y utilizar por el organismo.
